Cómo será la restauración del edificio histórico del Diente de Oro

En ésta oportunidad la presidenta del Colegio de Arquitectos de Río Negro, María Beatriz de Rafaelli, cuenta sobre los trabajos de mejora que se están desarrollando en la ex tienda de ramos generales, Diente de Oro, ubicada en la esquina de calles Fernández Oro y Villegas.

El Colegio de Arquitectos de Río Negro (CARN) abrirá su sede allí y tienen varios proyectos para darle fines culturales a lo que fue el primer almacén de ramos generales de Cipolletti.

Luego de realizar un concurso regional de anteproyectos de recuperación patrimonial y nueva sede del Colegio de Arquitectos se iniciaron las reparaciones.

En marzo 2022 la empresa Ingesud S.R.L comenzó con los trabajos de construcción de muros contrafuertes en el predio. Este avance significa reforzar el muro que se utiliza para transferir las cargas transversales a la cimentación y así poder recuperar el espacio como parte del patrimonio histórico de Cipolletti. La dirección de obra esta a cargo de la constructora ELE, de los arquitectos Jeremías Lupica y Christian López.

María Beatriz de Rafaelli destacó que es importante comenzar ver la historia, “Cuando comenzamos a realizar los trabajos de refacción del Diente de Oro, mucha gente nos contacto para contarnos sus historias. Nos pareció importante darle un nuevo uso para la comunidad.

La idea es generar un espacio que pueda ser utilizado por la comunidad, tiene una plaza central, un espacio donde se podrá hacer encuentros, peñas, y un SUM para exposiciones. Lo importante es preservar los edificios históricos pero que puedan ser utilizados por todos, para que no queden abandonados.  Esperemos que pronto la gente pueda ver las mejoras que se están realizando”, destacó.

Diente de Oro

“Diente de Oro” fue una popular tienda cipoleña de ramos generales que comenzó a funcionar en la década de 1930, en la esquina de Fernández Oro y Villegas, próxima a la estación del ferrocarril. La familia Schuvaks era la propietaria del comercio en el que, según cuentan, se solían brindar generosos créditos a los vecinos. De esta manera comenzaron a gozar de un importante prestigio dentro de la ciudad.

Allí se vendía ropa, muebles, sombreros y artículos del hogar, pero con el tiempo, comenzó a quedar en el olvido. La histórica esquina, con su arquitectura colonial, fue abandonada al dirigirse el desarrollo de Cipolletti hacia otros puntos.

La calle Fernández Oro tenía un protagonismo central en la vida comercial de la incipiente urbanización, con la aparición de la primera botica y el Hotel Argentino, que albergaba a visitantes de distintos puntos del mundo que llegaban por diversos motivos a la zona.

El por qué del nombre

Según indicó el recordado historiador cipoleño Roberto Abel, el comercio fue bautizado con ese nombre porque el dueño del lugar “tenía un diente incisivo muy pronunciado, totalmente de oro, y dada su habitual sonrisa, lo lucía permanentemente. Este fue el motivo por el que la tienda se llamo así”.

En el 2016 se presentó un proyecto para que el inmueble sea declarado un bien histórico enmarcado en la Ley 12.665 de creación de la Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos. Bajo este contexto, el emblemático edificio fue cedido por el Concejo Deliberante de Cipolletti por 99 años al Colegio de Arquitectos de Río Negro (CARN) de la ciudad.

Historias que reflejan la impronta de una comunidad pujante, y de una identidad que se construye día a día.