Según indicó la representante del Ministerio Público el hecho ocurrió en Balsa Las Perlas, el 2 de abril de este año, cuando durante un operativo montado por el área de control y fiscalización de fauna silvestre y el personal policial de la Unidad 82°, los imputados quienes se movilizaban en una camioneta VW Amarok, se dieron a la fuga ante el requerimiento de las autoridades mencionadas de que detengan su marcha.

A partir de allí, comenzó una persecución que se extendió por varios kilómetros finalizando con la detención.

Al revisar la caja de la camioneta, el área de protección de fauna silvestre, constató que en su interior se hallaban quince choiques, dos guanacos y un piche, que evidentemente habían sido cazados de forma furtiva. A los sujetos a los que se le formularon cargos en el día de la fecha se los acusa puntualmente de trasladar a los animales, puesto que no se pudo acreditar que los mismos fueran los que los hubieran casado.

Esta situación está penada por la Ley Nacioanal 22.421 y la Ley provincial 2.056. La primera de ellas en su artículo 27 prevé penas de entre dos mes y dos años de prisión y de hasta cinco años de inhabilitación “al que a sabiendas transportare, almacenare, comprare, vendiere, industrializare o de cualquier modo pusiere en el comercio piezas, productos o subproductos provenientes de la caza furtiva o de la depredación”.