Según relató la madre de la alumna, a las 7.45 la estudiante se baja del colectivo y cuando estaba por ingresar al predio de la Facultad, justo en el portón de acceso, dos hombres la agarran por detrás le ponen una soga al cuello y le tapan la boca, uno la agarra de los brazos y el otro de los pies y la intentan subir a un auto blanco chico con vidrios polarizados, ella no recuerda la marca, en ese momento una vecina al ver lo que estaba sucediendo la ayuda a zafar y entre gritos y forcejeos y al ver venir más gente, los secuestradores se escapan.

La denuncia por parte de la estudiante se realizó ante el fiscal de turno, Martín Pezzetta, quién se encuentran investigando los hechos.

Mientras hacían la denuncia se enteraron de otro hecho similar, cerca de la 10 de la mañana, en el Barrio San Pablo, a otra estudiante de la Facultad, también un auto blanco con vidrios polarizados intentaron interceptarla, pero la joven al ver que la estaban siguiendo logró escapar.

Un grupo de estudiantes denunció también que una mujer estaba sacando fotos a las alumnas en el colectivo Ko Ko, hecho que motivó gran preocupación para los estudiantes y la comunidad.

Mañana a las 16 los estudiantes de Ciencias de la Educación y Psicología convocaron a una asamblea para exigir esclarecimiento del hecho y mayor seguridad en toda zona de la Facultad.