¿Hasta cuándo podés avistar ballenas en el Golfo San Matías?

La temporada alta de avistaje de Ballena Franca Austral se extiende durante todo el mes de septiembre en el Golfo San Matías. Los prestadores de servicios turísticos de Las Grutas y el Puerto de San Antonio Este continúan realizando salidas embarcadas de forma habitual, con una propuesta que permite apreciar mar adentro distintas especies marinas, entre las que se destacan estos imponentes mamíferos que cada año cuentan con más presencia en la Costa Atlántica Rionegrina.

Aunque tienen presencia activa en la región desde mediados de mayo, aún es posible deslumbrarse y maravillarse con los ejemplares de ballenas que se suman a la magnífica diversidad de animales que habitan las aguas del golfo, ofreciendo un espectáculo único que puede disfrutarse en una excursión sin igual. 

Al tratarse de un fenómeno impredecible no puede determinarse con exactitud hasta qué fecha pueden visualizarse ballenas en la Costa Atlántica Rionegrina, pero según la experiencia y el comportamiento habitual de estos animales se estima que permanecen en la región hasta entrada la primavera, o comienzos de octubre.

Sin embargo, hay otras especies que pueden apreciarse durante todo el año como lobos marinos de un pelo, delfines comunes, oscuros y nariz de botella y pingüinos a los que se suman una decena de aves costeras que colorean los cielos de la región y dan paso a increíbles y hermosas postales marítimas. 

Una actividad sin igual

Con precios competitivos, las salidas embarcadas ofrecidas por cuatro empresas habilitadas comprenden una increíble propuesta que se desarrolla desde enero hasta diciembre y se caracteriza por tratarse de una actividad amigable y respetuosa con el entorno y el medio ambiente, ya que se utilizan pequeñas embarcaciones con una capacidad máxima de diez personas que vuelven a la excursión una experiencia inolvidable e íntima. 

Cada paseo, en el que pueden observarse distintos ejemplares marinos y apreciar su magnitud desde una cercanía maravillosa, implica una sorpresa porque se desconoce por completo qué animales van a encontrarse, generando una reacción aún más emocionante en quienes deciden embarcarse, garantizando una vivencia única.