En total, la atleta, becada por el Ministerio de Turismo y Deporte, empleó 13 horas y 10 minutos para cumplir con el desafío y atravesar los 40 kilómetros de la prueba, condicionada por las frías corrientes que atraviesan el Canal, y cumplir así con el objetivo al cual se refirió como “el Everest para los nadadores”. 

Además, Ailén debió cumplir con las estrictas regulaciones impuestas por la Channel Swimming Association para dar como superado el cruce: no se permite ninguna ayuda artificial, excepto gafas, gorro (no de neopreno), pinzas para la nariz, tapones para los oídos y un traje de baño clásico que no ofrezca ni protección térmica ni flotabilidad. 

Debido a la suma de todos los requisitos y la exigencia física requerida, muy pocos nadadores han completado la prueba desde 1875, cuando fue culminada por primera vez por el inglés Matthew Webb. Actualmente son menos de 2800 los y las nadadoras que lo lograron. 

Con esto, Ailén quedó a un paso de conseguir la Triple Corona de Aguas Abiertas, luego de superar en 2021 el desafío 20 Puentes de la isla de Manhattan y ahora atravesar el Canal de la Mancha. Solo le resta enfrentarse al canal de Santa Catalina, ubicado en California, Estados Unidos para obtener el galardón internacional.

 De esta manera, la atleta viedmense, que a comienzos de año culminó primera en la sumatoria de puntos de la International Winter Swimming Association y se coronó campeona mundial, sigue llenando de orgullo a todos y todas las rionegrinas y continúa llevando la bandera provincial a lo alto de la natación internacional.