Un mecánico fue condenado hoy a 24 años de prisión por el crimen de un empleado del Poder Judicial de Río Negro que fue encontrado asesinado en noviembre de 2021 en esa provincia, luego de haber desaparecido en marzo de ese mismo año.

La pena recayó sobre Gregorio Antonio Colicheo, a quien hallaron culpable de los delitos de "homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego, en concurso real con portación de arma de fuego de guerra sin la debida autorización legal" en perjuicio de Javier Alejandro Videla.

Fuentes judiciales informaron a Télam que Colicheo también fue condenado por "portación de arma de fuego de guerra sin la debida autorización legal, en concurso real con abuso de armas" en perjuicio de su pareja, Claudia Casmuz, quien fue encontrada asesinada de un balazo en la cabeza el 4 de marzo de 2021 en el Campo La Perseverancia, ubicado en Casa de Piedra, a unos 75 kilómetros de General Roca.

Por ese femicidio, el 29 de junio pasado la justicia resolvió que se desarrolle un debate oral y público ante un jurado popular con Colicheo como único imputado.

Videla fue visto con vida por última vez el 3 de marzo de 2021 junto al mecánico en Roca, tras lo cual la familia de la víctima denunció su desaparición.

Finalmente, el empleado judicial fue encontrado muerto el 17 de noviembre del mismo año en un campo situado en el kilómetro 63 de la ruta 6, de Río Negro.

"La identificación se concretó mediante el cotejo de huellas dactilares", informó en su momento el fiscal Luciano Garrido y agregó: "Se pudo obtener un proyectil, que es del mismo calibre que fue utilizada para dar muerte a Casmuz y que pertenece al arma que había sustraído Colicheo."

De acuerdo con el funcionario judicial, ese proyectil también "se condice con los hallados en el vehículo de la víctima y en la propia casa" del ahora condenado.

Según explicó Garrido, el cuerpo de Videla "estuvo escondido debajo de una parte frondosa de arbustos y con el paso del tiempo fue corrido por las alimañas".

"Una persona advirtió aves carroñeras que daban vuelta por un lugar", detalló Garrido y aseguró que a pocos metros había "un alambrado y pisadas de caballo".

"Toda esa zona había sido rastrillada por personal policial durante las primeras diligencias", aclaró el fiscal.

Según la investigación, el cadáver de Videla fue depositado allí para luego ser enterrado dado que para los peritos no quedaron dudas que "los fluidos del cuerpo que estaban en el lugar eran de vieja data".

En tanto, el tribunal integrado por los jueces Gastón Martín, Alejandro Pellizzón y Fernando Sánchez Freytes coincidieron hoy con los pedidos de pena sostenidos por las partes acusadoras y remarcaron en su fallo que "quitar la vida a una persona es un hecho de consecuencias irreparable, cuyo daño es perpetuo".

Para los jueces no hubo motivación de "ningún tipo" sino que existió "un matar por matar, causando no solo el daño directo a la víctima del crimen, sino la destrucción de una familia, con consecuencias graves en la salud de la madre de la víctima y sus hermanas".

Asimismo, se tomó en cuenta "el ocultamiento de cadáver y la dificultad que esto generó en la investigación".

El tribunal destacó, a su vez, "el silencio que guardó" Colicheo, incluso después de estar detenido, lo que agravó el "infierno vivido durante esos nueve meses, como lo describió la madre de Videla, agregando dolor innecesario a los familiares y compañeros de trabajo de la víctima".

Colicheo ya había sido declarado culpable en mayo pasado y ahora se conoció el monto de la pena que le fijó la justicia.

Por su parte, Casmuz fue encontrada asesinada en el campo de Casa de Piedra en el marco de un operativo de rastrillaje de Videla.