El Municipio comenzó a acondicionar la Guardería Canina de Isla Jordán

El gobierno municipal comenzó con los trabajos para reordenar y reacondicionar las instalaciones de la guardería canina de la Isla Jordán, donde se alojan unos 300 perros que de otra manera estarían deambulando por las calles de la ciudad. "Estamos invirtiendo 12 millones de pesos anuales para sostener esta política destinada a la preservación de los animales”, explicó Cristian Blanco, secretario de Fiscalización de Cipolletti.

El primer paso del plan de la remodelación es el arreglo de todos los caniles y un programa de construcción de dos nuevos caniles por mes y las oficinas administrativas; el mejoramiento de la iluminación, la construcción de bebederos y la adaptación de la zona de contenedores. “El agua de todo este sector se capta de una perforación que está a 10 metros de profundidad”, aclaró el funcionario. 

La guardería tiene seis empleados municipales en forma permanente: cuatro que desempeñan tareas de lunes a viernes, entre las 7 y las 14; y dos serenos que cumplen funciones los fines de semana.

El programa incluye también “la reestructuración de la dirección de Zoonosis, para que pueda cumplir las funciones que queremos darle. Por ejemplo, el equipo de castraciones pasó de tener un solo veterinario a tener tres veterinarios y tres auxiliares. Tenemos un quirófano fijo ubicado en el club San Martín y estamos comenzando con el de la Isla Jordán. Además vamos a continuar con los dos quirófanos móviles. Uno se instalará durante todo el mes de julio en Las Perlas. El otro, irá rotando por los otros barrios de la ciudad en forma alternada”, enfatizó Blanco.

También se ordenará el programa de Adopción Responsable de mascotas, que de acuerdo a la ordenanza vigente implica una bonificación en el pago de las tasas municipales. “Queremos que haya un registro para saber quiénes se suman a esta propuesta y un seguimiento de esos casos. Se estaba manejando con mucha desprolijidad y nos hemos propuesto transparentarlo a toda la comunidad”, dijo el secretario de Fiscalización.

Otro de los objetivos de la gestión es construir un espacio destinado a los animales peligrosos o con antecedentes de ataque a los vecinos. “Tenemos que aislarlos y reeducarlos porque son un riesgo para la comunidad”, explicó.

Blanco precisó que la situación de pandemia por el coronavirus y el aislamiento obligatorio trastocó los planes originales. “Tenemos personal que está dentro de los distintos grupos de riesgo y estamos haciendo todo lo posible para continuar con nuestra política hacia las mascotas. Hay quienes no quieren entender que la decisión de suspender las castraciones fue una decisión sanitaria, no un capricho. Son los que tampoco valoran el trabajo de los empleados municipales. Pero vamos a demostrar que estamos en el camino correcto; vamos a mejorar las instalaciones y a continuar de forma transparente con esta política de protección y tenencia responsable”, remarcó.