Según indicó la fiscalía a cargo de la acusación, el hecho ocurrió el pasado 24 de diciembre alrededor de las 17:50 cuando el acusado se hizo presente en la vivienda de su expareja con la excusa de retirar prendas de vestir que se encontraban en el lugar.

Una vez allí, comenzó a insultar a las personas que se encontraban en el lugar y a exigirles que se retiraran de la vivienda.

Previo a todo eso, el pasado viernes (22/12), la jueza de paz de Fernández Oro había dictado una prohibición de acercamiento que impedía al acusado acercarse al domicilio de la víctima y mantener todo tipo de contacto.

La calificación legal del caso es desobediencia a una orden judicial en el contexto de violencia de género, y el acusado lo está en calidad de autor.

Además, los representantes del Ministerio Público Fiscal solicitaron la prisión preventiva del hombre. Argumentaron que, en caso de recuperar la libertad, el mismo podría darse a la fuga para evitar afrontar el proceso penal en su contra o que podría intentar entorpecer el normal avance del proceso.

Es importante destacar que el acusado cuenta con antecedentes penales computables, por lo que, en caso de ser condenado, la pena será de cumplimiento efectivo.

La defensa oficial que asistió al imputado no realizó planteos respecto de la formulación de cargos ni sobre la viabilidad de la preventiva.

En consecuencia, la jueza de garantías tuvo por formulados los cargos y dictó la medida cautelar. El acusado estará detenido por al menos los próximos cuarenta días, plazo en el que se prevé avanzar en un procedimiento abreviado o en el pedido de control de acusación previo al juicio oral y público.