Como cada año, el Instituto de Asistencia a Presos y Liberados (IAPL), dependiente de la Secretaría de Estado de Seguridad y Justicia, organizó una iniciativa solidaria a través de la cual, internos del Penal 1 de Viedma elaboraron 500 panes dulces para entregar a sus familias, a comedores y merenderos de la capital provincial. En este caso la actividad fue llevada a cabo junto a la Municipalidad de la localidad.

Pero además, este año se sumó otra buena idea para la Navidad como es la realización también por parte de los internos, de juguetes didácticos de encastre para regalárselos a los niños y niñas de sus familias.  Durante un evento desarrollado a principio de mes se entregaron la mitad de los juguetes, mientras que en estos días se está haciendo lo propio con el resto en el marco de esta actividad entre el IAPL y el  Gabinete Técnico Criminológico del Servicio Penitenciario de Río Negro.

El presidente del IAPL, Fabián De la Guarda, resaltó el hecho de poder implementar estas acciones solidarias y sociales: “Es un rasgo identitario que tiene nuestra institución. Durante todo el año y sobre todo en pandemia, durante la parte más cruda,  también estuvimos trabajando en otras actividades solidarias. En esta oportunidad hicimos 500 panes dulces junto con los internos del Penal 1 de Viedma y los referentes del área de Cocina que estuvieron supervisando la actividad".

"Nos acompañó nuevamente la Municipalidad de Viedma con la compra de insumos junto con nosotros. Una vez terminados los panes dulces, los llevamos a la sede de la Delegación donde se hizo la terminación, empaquetado, adornos, glasé y demás. El destino de los panes dulces siempre es para los familiares de los internos, merenderos y comedores de la ciudad de Viedma”, agregó el Presidente.

De la Guarda destacó que este tipo de iniciativas generan una energía positiva dentro de todas las partes que intervienen, y comentó que “no hay dudas en la generación de estas actividades, todo el mundo se suma, incluso otros equipos, otros integrantes de la Secretaría, porque la verdad que es una actividad que es por el prójimo y nos enriquece a todos”.

Por otro lado repercuten también en la cotidianeidad de las personas privadas de su libertad: “Estuvieron haciendo juguetes de encastre de madera  y también tiene que ver con una actividad solidaria sobre todo para niños que no pueden acceder a un juguete comprado. Son juguetes didácticos, de encastre, la verdad que hermosa la actividad hecha por varias áreas del Penal y con el IAPL que aportó los insumos”, concluyó De la Guarda.