Formulación de cargos y prisión preventiva para el acusado del crimen de Díaz

El hecho investigado sucedió el pasado sábado 6 de febrero de 2021, alrededor de las 20:15 cuando el acusado junto a otros hombres se hicieron presentes a bordo de dos vehículos en una vivienda ubicada en el Pasaje 100 de esta ciudad en donde se encontraba la víctima fatal junto a un grupo de amigos.

En esas circunstancias, el joven habría disparado en al menos siete oportunidades. Producto de lo anterior, Hugo Víctor Díaz resultó herido en la zona inguinal, lesiones que le provocaron la muerte en el hospital local el día 7 de febrero a las 11 horas. Por el ataque también resultó herido uno de los amigos del fallecido.

La calificación legal del caso es homicidio y lesiones leves agravadas agravadas por el uso de arma de fuego y portación ilegal de arma de guerra sin la debida autorización legal.

Entre las principales evidencias el fiscal mencionó la declaración de un allegado a Díaz quien observó todo lo ocurrido e identificó al detenido como el autor de los disparos, además de un video capturado por otro testigo del caso que captó una escena de lo ocurrido.

La fiscalía además solicitó la prisión preventiva del imputado, entendiendo que en caso de recuperar la libertad podría entorpecer la investigación y sosteniendo además que existía riesgo de fuga. El abogado de la querella que representa a los familiares del fallecido adhirió a la solicitud de la medida cautelar del Ministerio Público.

La defensa particular que representó al sospechoso consideró que no estaban acreditados los riesgos procesales aludidos, por lo que solicitó medidas cautelares menos restrictivas.

La Jueza de Garantías que intervino en la audiencia dictó la prisión preventiva del hombre entiendo que se había acreditado el peligro de fuga. Al respecto sostuvo que si bien el mismo se entregó el pasado lunes en la sede del Ministerio Público Fiscal, la voluntariedad de ese acto se vio viciada porque sobre él ya pesaba un pedido de detención y que además había tomado conocimiento que se habían hecho distintos allanamientos para proceder a su detención, por lo que su ubicación y privación de la libertad era próxima en el tiempo.

Agregó que no se había acreditado que el joven tuviera arraigo en la zona, respecto de si tenía una vivienda fija, cual era su ocupación, o su composición familiar, entre otros aspectos. El plazo de la medida cautelar es de cuatro meses podrán ser prorrogados de acuerdo a los avances de la investigación.