El mediocampista ofensivo Eduardo "Toto" Salvio padece un desgarro grado dos en el isquiotibial derecho que le demandará al menos 20 días de recuperación, de manera que es prácticamente imposible que puede jugar para Boca el 25 de noviembre próximo ante Internacional de Porto Alegre, en el cruce de ida de los octavos de final de la Copa Libertadores de América.

"Eduardo Salvio padece una lesión grado dos en el músculo isquiotibial de la pierna derecha", informó el departamento médico "Xeneize" en un comunicado difundido por Boca en su cuenta oficial de la red social Twitter.

El "Toto" Salvio, de 30 años, se retiró con la molestia muscular en el partido del domingo pasado que Boca a Newell's (2-0) en el estadio Marcelo Bielsa, de Rosario, por la segunda fecha de la Copa de la Liga Profesional. El jugador fue reemplazado por Gonzalo Maroni, sobre el final del partido.

La lesión del jugador surgido de Lanús motivó su exclusión del seleccionado argentino, al que había sido convocado por el entrenador Lionel Scaloni para la doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas, ante Paraguay el jueves en la cancha de Boca, y frente a Perú el martes 17 de noviembre en el estadio Nacional de Lima), por las fechas 3 y 4, respectivamente.

De manera que una vez comprobada la lesión de Salvio, se perderá los dos partidos con Argentina, el primero ante Inter en Porto Alegre y llegaría con lo justo al partido revancha de los octavos de final, que será el 2 de diciembre en la Bombonera.

Salvio estaba descartado, lógicamente, para los partidos ante Talleres de Córdoba y Lanús, por las jornadas tercera y cuarta de la Copa de Liga Profesional, aunque lo que realmente le interesa a Boca es la Libertadores, el gran objetivo del club que pretende conquistarla por séptima vez.

Salvio se incorporó a Boca en julio del año pasado, procedente del Benfica de Portugal, a cambio de una cifra cercana a los 8 millones de euros, y en su primer semestre en el club había sufrido dos lesiones musculares que le imposibilitaron tener continuidad bajo la conducción del entonces DT Gustavo Alfaro.

En plenitud física, en el ciclo de Russo, Salvio se convirtió en figura clave del equipo que alcanzó la Superliga 2019-2020 y brilló también en la fase de grupos de la Libertadores.